La Incertidumbre y las Preguntas en el Coaching

Todo parte del vasto y profundo mundo que existe, y al enfrentar las situaciones las personas, tal vez esto no fue  siempre así, tal vez tenga que ver con la tecnología y con el constante emerger con ello de mundos y realidades diferentes, así como la cantidad de personas que ahora somos en nuestra aldea.

 


Pero no para todos es claro, lo vasto del mundo, pero si una gran incertidumbre en la vida, en diversas etapas de la vida, hasta tu vida actual  y seguirá hasta antes de nuestro fin en este mundo.

Se puede percibir esa inmensidad e incertidumbre como demasiada información, demasiadas elecciones o dudas a resolver, demasiados caminos a elegir, demasiados proyectos y personas a atender, y permanentes cambios.


Lo que si todos hacemos “conscientemente o no” es tomar decisiones sobre que caminos elegir, y habrá decisiones más acertadas o menos que nos acerquen a los  fines que perseguimos, mismos que viene de elecciones sobre preguntas que nos hicimos.

El éxito de unos proviene de esas preguntas, sus respuestas y decisiones.

Las preguntas que te haces, te llevan a tomar decisiones, y esto a acercarte a lo que deseas (la no acción también es una decisión que te puede acercar a tu meta).

Todos nos hemos hecho miles de veces  preguntas, enfocadas a situaciones fundamentales en nuestras vidas o para resolver situaciones cotidianas: 

¿Qué hago?, ¿Qué elijo? ¿Qué me conviene más?

Otros se hacen más preguntas antes de contestar las anteriores. Y eso hace la diferencia en sus resultados.

Es por lo tanto la capacidad de hacerse preguntas el inicio para poder resolver situaciones.

Ninguna situación tiene una solución, ni un solo camino para resolverse, y esto lo origina la faculta de las personas de hacerse preguntas de diversos tipos para abordar la situación que se les presente.

Las preguntas abren horizontes, las respuestas los cierran, y ponderar varias respuestas da la capacidad de tener opciones, incluso la de hacerse nuevas preguntas y con ello diversas formas de responder a la realidad.

Tal vez sea válida la premisa que:

“Los mejores resultados son aquellos que se han abordado con la mayor cantidad de preguntas”
Por supuesto es importante la calidad de las preguntas  y sus  respuestas, así como  del análisis de las respuestas.

Las preguntas por lo general: abren caminos, generan posibilidades, establecen claridad, despejan el camino, abordan nuestros intereses, nos retan, buscan la creatividad, nos acercan a la consciencia.

Son la puerta para entrar en consciencia, sobre nosotros mismos.

Nos ofrecen en nuestro interior un dialogo intenso y lleno de sorpresas, ofrecen la oportunidad de vernos y ver el mundo no solo de una manera.

Generando preguntas sobre lo que pensamos y lo que hacemos, como:

 ¿Por qué pensamos lo que pensamos y no pensamos otra cosa?

Podemos identificar  juicios y creencias, para después cambiarlos o  reafirmarlos. Crecemos en consciencia.


Las preguntas están relacionadas con tu Curiosidad y Creatividad, así como con tu personalidad sobre cómo abordar la realidad.

Pregúntate: 
¿Qué tantas preguntas me hago sobre lo que sucede, o lo que me sucede? Y esto te puede llevar a saber que tanta Curiosidad tienes en la vida. 

En el desarrollo de las personas cantidad y calidad  de preguntas tiene que ver con la madurez, pero sobre todo con el desarrollo personal.

En el Coaching, algunos lo definen como el arte de hacer preguntas poderosas, es decir, que muevan al Coachee, para hacerlo un observador diferente de la realidad.

Las preguntas que hace el coach al Coachee antes de realizarlas provocan un debate interno en él, sobre en el Coach principiante.

La pregunta clásica es:

¿Qué pregunta le hago que le ayude a ver, lo que no ve o que lo vea  diferente?

Conforme se avanza en el coaching las preguntas van saliendo del contexto que el Coachee expresa, de los dichos sobre sus juicios y creencias, sobre su discurso y la relación de sus acciones con ese discurso, y de como esas afirmaciones lo hacen o no acercarse a su meta, o intereses.

Por lo tanto vemos las preguntas del Coach hacia sí mismo, que pueden ser sobre sus actos lingüísticos: Declaraciones, Afirmaciones, Juicios Promesas, Peticiones, Ofertas, en pleno análisis de sí mismo.

Las preguntas en el Coaching tienen  2 puntos centrales:
  • Son la fuerza que da al Coachee para la Indagación y pueda entender el Coachee, contexto, juicios, creencias, emociones, metas, en general aquello que lo acerca y que lo aleja de sus metas u objetivos.
  • Son los detonadores que le llegan al Coachee para abrirse posibilidades, y ser un observador diferente, un marinero que ve la inmensidad del océano, con  una esperanza que lo empuja a la acción.

Las Peguntas nos vinculan con el mundo del otro, nos hacen que generemos empatía, son provocadoras de estados de ánimo, impulsan a la acción, y fomentan la escucha.

En realidad, sin preguntas no hay desarrollo, son la herramienta preferida del: Curioso, del Creativo y del Coach.


Solo con ellas podemos ser mejores navegantes en el mundo de la incertidumbre y lo vasto y profundo de su océano.

Benjamín Olivares, Coach.



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